Las aguas termales son aguas que se han ido filtrando desde
abajo hasta llegar a la superficie de la Tierra, y que forman pequeñas fuentes.
Son aguas naturalmente cálidas que surgen de los suelos y que contienen diferentes propiedades que
son beneficiosas y que contribuyen para la reparación de la piel. Son calmantes
para el sistema nervioso, son excelentes cicatrizantes, y también ayudan a la
hidratación y revitalización celular. Sus recursos mineromedicinales son utilizados
para mejorar la calidad de la salud en las personas, en variados aspectos.
Entre otros beneficios, depuran la sangre y eliminan toxinas, pueden reactivan
el metabolismo en general, ayudan en problemas que tienen que ver con la mala
circulación y aumentan considerablemente el sistema de defensas.
Pero bien, más allá de estas buenas cualidades, las aguas
termales son disfrutadas de muchas maneras, como lugares de esparcimiento, de
relajación y diversión. En México, existen hermosos sitios con piletones termales,
dispuestos a modo de balnearios.
Entre ellos, el Parque Acuático Ecológico Tlacotlapilco, que
está situado en el Estado de Hidalgo, ofrece aguas termales de origen
volcánico, que mantienen una agradable temperatura, que ronda entre los 40° y
45° C. Este sitio se encuentra actualmente ubicado en lo que antes era la zona
de esparcimiento de la comunidad. Es un
complejo turístico que se caracteriza por sus amplios espacios verdes y por su
frondosa vegetación. Allí se dispone de sitios para ir de campamento y
campismo, hermosos estanques, tienda de artesanías y objetos regionales,
gastronomía mexicana típica y servicio de spa.
Otro de los balnearios con manantiales naturales de aguas
calientes se encuentran en Coahuila. Si bien es ésta una zona semidesértica,
sorprende saber que existe una gran cantidad de termas. Los balnearios El
Chorro y Tanque de luz ofrecen estos servicios, en donde aprovechan los que la
naturaleza ofrece por sí misma para convertirlos en maravillosos y
reconfortantes spa.
Mencionando otro destino, Chignahuapan, ubicado a unos 180
Km. de la Ciudad de México. Siendo parte de los atractivos del Estado de
Puebla, este maravilloso lugar es internacionalmente reconocido por sus
perfectas condiciones naturales. Entre ellas, las aguas termales sulfurosas,
piletas naturales rodeadas de una extensa vegetación y de amplias montañas, un
paisaje que en su conjunto, hacen soñar al visitante con el verdadero paraíso.
El manantial Taboada en Guanajuato, es el más popular en
México, ya que es reconocido particularmente por las propiedades sanadoras de
sus aguas. Se dice que sanan o mejoran estados de reumatismo, problemas de la
piel, problemas de circulación y desórdenes nerviosos. Los centros turísticos
allí ubicados son Azul Spa y Hacienda de los Cobos.
Por último, el Balneario de Lourdes, en Santa María del Río,
San Luis de Potosí, se postula como una excelente opción para disfrutar de la
calidez del agua. Este manantial se caracteriza porque posee aguas radioactivas
fuertemente alcalinas. Son sumamente curativas, puesto que tienen acciones
benéficas para afecciones de tipo hepático y renal.
Además, el lugar convoca a cientos de personas porque en San
Luis de Potosí, la naturaleza es extremadamente exuberante. Los manantiales son
múltiples, pero también abundan los ríos, cascadas y lagunas. El flagrante
verde de su vegetación forma parte de ese entorno en donde la inmensidad de la
naturaleza domina soberbiamente e inspira sólo belleza.
Belén Nocioni.
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